Cuando el cazador de mentiras opta por analizarlo todo...

Una máquina de mentiras de carne humana: La historia de un pobre cazador de mentiras

Me encontraba haciendo mi trabajo como de costumbre. Ella estaba ahí, a mi lado. Estábamos haciendo nuestro trabajo hasta que al final del interrogatorio ella dijo algo. Lo grabé. Mi mente lo grabo con un cassette que tenía guardado entre los recuerdos y neuronas que conectaban con muchas partes de mi cuerpo. Estaba polvienta y esperaba el día perfecto para poder usarlo. Hoy fue ese gran día que tanto añoraba.

—Se miente así misma—dice mientras dábamos unos pasos apresurados.

— ¿Ya está? ¿Es eso? ¿La gente cambia pero sigue en adelante? —pregunté dándome media vuelta y la miré.

— ¿Osea que yo soy la que cambié? —preguntó.

— Tú me dejaste —dije haciendo una gran pausa—, te fuiste.
— Sí.  Pero fue por ti.
— ¡¿Entonces es culpa mía?! —exclamé, estaba a punto de estallar.
— No, digo que deberías pensar en lo que pasó antes de culparme.
—Eh, ¡yo vi lo que estaba pasando! Veía lo que estaba pasando, veía la duda en ti, ¡podía ver tus dudas cuando estábamos todavía en el altar!
— ¡Todo el mundo tiene dudas! —dijo mientras cruzaba los brazos— ¡Todo el mundo! En el altar con los amigos, en la sala de partos cuando ves lo mejor que te he pasado en la vida, pero eso no significa que sea lo único que sienten. Pero tú... tú veías cada duda, cada temor. Era lo único que veías y no lo podías evitar.
— Quería ser sincero —dije tratándome de apasiguar.
— Si. Lo sé, lo sé. Pero lo que pasa es que tanta sinceridad es demaciado en un matrimonio.
— ¿Prefererías estar con alguien que no te conoce realmente? —pregunté con firmeza.
— Con alguien que no necesite saberlo todo de mí —contestó sin pensarlo dos veces—. Alguien al que pueda sorprender en su cumpleaños. Alguien que no tenga que señalarme cada vez que miro a un hombre que no me atrae.
— Alguien con la cabeza en el culo —dije tratando de no pasarme con las bromas.
— Alguien que no estudie mis cejas cuando estoy ante el en tanga.
— ¿A qué has venido? ¿Por qué me has contratado? ¿Eh? —le pregunté, al fin y acabo, yo quería saberlo.
— Es un caso difícil.

Mis ojos sintieron el dolor, podía sentir que se ahogaban y estaba seguro que los de ella también. Todavía, entre los escombros, estaban nuestros sentimientos adheridos uno al otro, como una pegatina al que le desnudabas por la parte trasera para poder ver esa fina capa de adhesivo, pero que algún día se desprenderá de nuestra piel con el correr del tiempo.

Lo que acabas de ver es un fragmento de un capítulo de Lie to Me llamado: La mejor mitad (Better half), en Inglés. Concretamente, todo lo que está en guión largo son las líneas de Dr. Cal Lightman y de su ex-mujer, Zoe Landau cuando finalizan un interrogatorio con unos periodistas, pero no hablaré del capítulo. Eso sí, le añadir un extra con los guíones largos para que separará a cada uno su dialogo para saber que era lo que pensaban o sentían. En pocas palabras, un extra para que pareciera una novela literaria. Ahora sí.

¡Hola a todos! En mi anterior post (entrada), llámalo como más te gusté hablé acerca sobre las mentiras y cuántos tipos de mentiras existen. Pero al finalizar mi post anterior les cité una frase de Dr. Paul Ekman (el verdadero detector de mentiras) sobre los riesgos colaterales que podía tener el cazador de mentiras si optara por descubrir todas las mentiras que lo rodean. De eso es lo que hablaremos hoy. Y por eso he decidido poner algunas líneas de lo que discuten Cal y Zoe, pues es un capítulo, que desde el primer día que lo vi, no puedo olvidar. Y es sobre los riesgos al querer descubrir todas las mentiras. Comencemos.

¿Qué pasa cuando aprendes sobre el Lenguaje Corporal? ¿Sobre PNL? Cuando alguien aprende a usar la Comunicación No Verbal se puede a frentar a dos riegos:

1. Ambición al querer desenterrar todas las mentiras posibles en un mismo contexto.
2. Perder círculos sociales.

El primer punto queda muy claro, y es que cuando más aprendes sobre el Lenguaje Corporal deseas añadirte más y más ambición al querer descubrir las mentiras, ¿cómo qué mentiras? Las de tu familia, amigos, colegas del trabajo y lo más importante: a tu pareja. Querás analizar todo, completamente TODO. Desde un desliz labial, pasando un pequeña comezón detrás del cuello hasta el fruncido entre las arrugas cuando las cejas bajan y se contraen por sí solas. Eso es lo que pasó a Cal Lightman, lo hemos vistos en los diálogos de Zoe y que citaré aquí mismo:  "Pero tú... tú veías cada duda, cada temor. Era lo único que veías y no lo podías evitar." Recuerda estas palabras y grábatelo en la cabeza: el cazador de mentiras optará por analizarlo todo. Así de simple. 

Cuando aprendes sobre el Lenguaje Corporal tu mente se empieza abrir al menos desde mi punto de vista. Ves al mundo con nuevos ojos. No lo ves igual al día anterior, a la semana pasada y ni al año pasado. Sabes que es el Sexto sentido que tanto añoraba el hombre, el poder saber lo que piensan los demás de ti (literamente), pero hasta que no podamos leer las mentras de otras personas hackeándoles su mente; el Lenguaje Corporal y la Comunicació No Verbal predominarán lo que resta del Siglo XXI. Claro está pronto existirán teconologías como las Google Glass de Google, el que puedan hacer el trabajo sucio por ti. Ese día nos joderemos todos y muchas mentiras estarán expuestas y afectará a un gran número de personas que podían hacer muchas cosas: matar o suicidarse. ¿Qué harías en caso de que descubrieras a tu padre teniendo sexo con otra mujer en la cama en donde se acuesta con su madre? Perderías el uso de la razón, te enfadarías mucho con él, le gritarías y harías muchas otras cosas. Ahora, copia y pega esa misma mentira en otras partes del mundo, ¿ya sabes qué pasará, no es así? ¡Eso es lo que me refería a mi anterior post! Descubrir una gran parte de las mentiras en nuestra vida puede afectarnos y afectar a terceros si piensas tomar cartas sobre el asunto (dependiendo del grado de la mentira).

El cazador de mentiras puede usar esa mentira como una arma de doble filo, ¿cómo para qué usarías una mentira? Te daré unos cuantos ejemplos: Descubrir una infidealidad con la chica que te gusta y delatarla con su novio y sus amigos si no se lo engaña saliendo contigo (incluyendo el sexo cada semana), descubrir a un profesor cambiando los resultados de los  exámenes y señalarlo que sé lo dirás a toda la escuela o universidad si no te pasa de un "5" a un "7" como mínimo en todos tus exámenes durante el resto del año. Te dejo a ti que pongas juego a tu imaginación con otras mentiras gravisimas o pequeñas piadosa.

La mentira puede usarse tanto a tu favor como a tu contra, pero ten en cuenta que puede usarse como una cachiporra y puedes dañar a muchas personas. Ahora te darás cuenta por que la importancia de no descubrirlas todas. Dañas a alguien y no sólo tú estarás frito: perderás amistades y si hay algo más doleroso que perder a un amigo, es a un amor; a tu pareja. La que deseas abrazar y besar todos los días y recordar buenos momentos en marcos de fotografías. De eso hablo en el 2do punto, y es que puedes perder muchos de tus círculos sociales si los sofocas con preguntas mientras los analizas comos si fueras un escaner de computadora. No hagas eso, trata de no hacerlo porque lo que perderás será más que una cosa material, es  a un ser humano, a un ser querido tuyo. El cazador de mentiras puee quedarse solo. El cazador de mentiras puede perderlo todo.

En mi próximo aporte hablaré sobre las micro-expresiones un poco más a fondo. Te enseñaré a descubrir una sonrisa falsa de una genuina, pero eh. No la uses muy a menudo con tus parecientes cercanos. Por eso he hecho este aporte y es para que aprendas a limitarse en tus lecturas (sea el rostro, el cuerpo o los pies) sí, los pies también son un punto muy crítico para descubrir mentiras, pero eso no quiere decir que lo uses cotidiamente con las personas más cercanas. Todo esto es para mejorar tus habilidades sociales y puedas permitirte conocerte más a fondo.

Tocaré el tema de las sonrisas porque es algo que sabemos ocultar muy bien a la perfección cada uno de los habitantes de este planeta Tierra. Algunas son muy obvias, otras no, y es ahí donde te percatarás de que no todo lo que brilla es oro, o bien, no es como lo pitan. 

Las mujeres son perfectas para ocultar sus emociones, colocándose una máscara que diga: "SMILE" o una línea gruesa de color negro hecho en Word tapándose los ojos o la boca (la mayoría hace ambas cosas). Pero de eso hablaré en mi próximo aporte. Te ayudará bastante a la hora de sonreír con personas que no son tus amigos o son de una jerarquía importante.

¡Nos vemos!