Hilos de conversación: Dile adiós a esos silencios incómodos

¡Hola, adolescentes!

Lo prometido es deuda, y antes de que acabé la semana, quiero compartirles cierta técnica que me ha ayudado a la hora de abordar personas, sin importar la edad o el color de piel con quien hablo. Y que, vaya por fin, tenga un poco más sentido esto con relación al nombre que da este blog.
 Como bien dice el título, los hilos de conversación es una técnica que entra en el género de las habilidades sociales. ¿Y qué son las habilidades sociales? Es la capacidad en la que tú, como persona, puedas socializar con las personas de manera cálida y genuina con las herramientas que estén a tu alcance o, bien, haz logrado afinar a lo largo de los años. Las habilidades sociales congenian muy bien con las personas que son extrovertidas y divertidas. Son como pequeños héroes que hablan muy bien de ellos ciertos grupos sociales (amigos de la escuela, compañeros del trabajo, equipos de eventos deportivos, clubs de lenguajes, etc.).

Así que, como te imaginarás, las personas que son tímidas no entran en esta categoría. ¿Y por qué? Porque son calladas, solitarias, difícilmente podrán delegar con ciertos individuos de su mismo ámbito o en un grupo que comparten en específico (clase de inglés, danza, repostería, etc.).

Y no es que quiera echar arena sobre nadie, pero las personas tímidas son las que más les cuesta encontrar un tema de conversación. Se ponen nerviosos al lado de la persona que les gusta y se sienten amenazados cuando están cerca de una personalidad dominante o carismática. Todo aquello que no son y que les gustaría ser. Soñar es muy fácil, pero llevarlo a la acción lo es aún más difícil. Por eso optan por encerrarse en su mundo y no conocer el mundo de otros. Sus experiencias. Fracasos. Momentos fabulosos. Huyen de ello porque no saben cómo co-relacionarlo. Tienen encendido su lado racional y apagado el emocional. Se estresan al inicio y mitad de una conversación, y es ahí donde vienen los horripilantes silencios incómodos, y se preguntan: «¡Demonios! ¿Y ahora qué le digo?», mientras sus ojos están desbocados como un caballo, mirando por todas partes.

No te engañaré, solía pasar por ello en mi época de puberto-adolescente. Y eso no quiere decir que se haya ido, o al menos de la misma manera en cómo era antes. Hay puertas que por más intentes buscar la llave para llegar hasta el fondo de su ser, simplemente estás no se abrirán. Y sí, crudamente podré decirte que tenga que ver con tu aspecto físico, la anatomía de tu rostro, voz, personalidad y un interminable etcétera por adelante...

... Pero eso es un punto y aparte. Hoy vengo a enseñarte que es posible tener una conversación con cualquier persona. No necesitarás fingir ser algo que no eres, solo mostrarte como tal (y de la mejor manera posible). ¿Estás listo?

¿En qué consiste los hilos conversación?

Un hilo de conversación consiste en dar en seguimiento de lo que tú o tu interlocutor estén conversando y que, a partir mediante palabras claves, puedas crear un hilo con el que podrás darle continuidad a la plática sin estar pensando en el futuro inmediato. O lo que es peor para un tímido; estresarse hasta llegar a un punto en el que se queda paralizado por completo.

¿Cómo es la estructura de un hilo de conversación?

Muy fácil. «X» persona habla de algo peculiar o tú comienzas con una interrogante, por ejemplo:

— ¿Qué tal el calor por allá?

— Pues diario a treinta y tantos. Ahora 36. Pero igual no lo siento tanto, porque me la paso en el aire acondicionado, pero cuando salgo al sol; está muy fuerte.

Nota como las palabras marcadas en rojo dan para crear nuevos hilos en una conversación. Rápidamente podríamos usar la palabra «aire acondicionado», incluso hasta «sol» podría darnos a nuevas rutas posibles. Veamos como yo podría utilizar la primera palabra a mi favor.

— Apuesto a que te llevas el aire acondionado a modo de reloj para refrescarte. Me lo imagino (en relación a lo del que el sol está fuerte). Mi piel adquirió una tonalidad prieta (morena).


—Ja, ja. Mi piel igual se quemó, pero cuando fui de vacaciones de Semana Santa. Ahora, ya se está semi recuperando.

Observa como la palabra «piel» abrió un nuevo hilo de conversación a partir del anterior hilo, y el o ella responde con la misma palabra más dando una explicación de cómo ocurrió que se quemó. Las palabras «vacaciones» y «Semana Santa», además de darnos la explicación, abren a nuevos hilos... ¡Esos son los famosos hilos de conversación!

En resumen, un hilo de conversación se crea a partir de:

1. Tú o la otra persona inician y lanzan un tema al aire.
2. A partir de la plática, «extraes» las posibles palabras candidatas para crear nuevos hilos.
3. Seleccionas la palabra ganadora, y respondes.

Como ves, no es nada del otro mundo; sin embargo, hay que tener en cuenta que habrá ocasiones en que no podrás utilizar esta técnica a cierto tipo de personas. Lo sé, lo sé. En un principio dije que puedes tener una conversación con cualquier persona. Pero preguntante a ti mismo, ¿es realmente posible caerle bien a todos? La respuesta es un rotundo no. Y al no caerle bien a medio mundo significa que no podrás establecer un diálogo como tal con la persona con la que deseas abordarla. ¿A qué se debe esto?

1. Se mantiene distanciada (cero contacto visual, brazos y piernas cruzas, dorso inclinado hacia tu lado opuesto etc.).
2. Te pone en segundo plano, es decir, se distrae con suma facilidad (revisa su celular, por ejemplo).
3. Es cortante y busca la manera más facil de finalizar la conversación.
4. Te contesta de manera abrupta, te señala y es fría en todo momento

Lo anterior es un llamado de advertencia de que debes alejarte inmediatamente, y dar por finalizado la conversación. ¿A dónde quiero llegar con todo esto? Que no siempre es posible a abrir cerraduras, por mucho que seas un maestro de las ganzúas. Tenlo mucho en cuenta cuando estés a punto de usar la técnica de los hilos de conversación. Ensayo y error, es lo que te puedo decir ante esto.

Créditos: a mi mentor @naxxos, ya que fue él quién me enseñó esta bellísima técnica.

¡Hasta la próxima, adolescentes!